4 mitos sobre el crédito para negocios desmentidos

 

Muchas personas tienen tarjetas de crédito y están familiarizadas con los préstamos a plazos. Pero las líneas de crédito para negocios a menudo no se entienden bien porque ofrecen algunos de los beneficios de las tarjetas de crédito y los préstamos.

Al igual que una tarjeta de crédito, una línea de crédito es flexible porque puedes aprovecharla en cualquier momento hasta tu límite preaprobado. La diferencia es que obtienes efectivo para gastarlo en la forma en que necesites hacerlo. Por ejemplo, un propietario de un negocio podría solicitar una línea de crédito para cubrir el costo de muebles de oficina nuevos u otros gastos importantes. La cantidad exacta de crédito y la tasa de interés que termine recibiendo dependería de una serie de factores, como su puntaje de crédito, y es posible que no reciba tanto como lo recibiría si hubieran tomado un préstamo a cierto plazo. Pero una línea de crédito para negocios podría proporcionarle decenas de miles de dólares en capital rápido con una tasa de interés más baja que la tarjeta de crédito típica.

Aunque una línea de crédito para negocios tiene muchos beneficios, no siempre es la herramienta adecuada. Distinguir entre la realidad y la ficción puede ayudarte a decidir si una línea de crédito puede marcar la diferencia para tu negocio.

 

Mito n.º 1: El proceso de solicitud es largo y complicado.

El proceso de solicitud de cada prestamista para una línea de crédito es un poco diferente. En general, envías una solicitud que incluye datos financieros y otra información. En muchos casos, un especialista de préstamos programa una entrevista para hacer preguntas y abordar inquietudes. Si esto aparenta ser mucho, no lo es, especialmente si ya tienes una relación bancaria con el prestamista.

Algunos prestamistas tienen un proceso de solicitud por Internet que puede completarse en unos minutos. Si estás haciendo la solicitud a un prestamista con el que haces operaciones bancarias, tu representante bancario generalmente estará encantado de ayudarte con tu solicitud y responder tus preguntas con anticipación. Las solicitudes de línea de crédito para negocios a menudo se aprueban dentro de un par de semanas o incluso, si la transacción es simple, en unos días. Tener una cuenta bancaria para negocios con tu prestamista puede ayudar a acelerar este proceso.

 

Mito n.º 2: Necesitas un puntaje de crédito perfecto para obtener una línea de crédito para negocios.

Cuanto mejor sea tu historial de crédito, más sólida será tu solicitud. Sin embargo, es posible que muchos negocios con un historial de crédito breve o que hayan cometido errores en el pasado sean aprobados para una línea de crédito para negocios. Lo que más importa es tu historial reciente. ¿Tienes una tarjeta de crédito para negocios? ¿Has hecho todos tus pagos a tiempo en los últimos 12 meses?

Si tienes crédito, es posible que empieces a pagar una tasa de interés más alta. Pero durante la revisión anual de tu línea de crédito, es posible que puedas hacer que tu prestamista reduzca la tasa si has estado usando tu crédito de manera responsable.

 

Mito n.º 3: Solo un negocio que falla necesita crédito.

Muchas personas creen que un negocio que pide dinero prestado debe estar atravesando problemas. De hecho, lo contrario suele ser cierto. Por lo general, los prestamistas no quieren dar dinero a un negocio que no está funcionando bien porque es poco probable que un negocio que esté en problemas pague su deuda. Los negocios con ingresos sólidos y buen flujo de efectivo son prestatarios ideales.

¿Por qué un negocio exitoso querría tomar prestado? En pocas palabras se trata del costo de oportunidad. Pedir prestado con una línea de crédito para negocios puede ayudar a que un negocio de temporada esté listo para cuando las ventas empiecen a aumentar, puede proporcionar flexibilidad para comprar inventario con descuentos o proporcionar flujo de efectivo para que las operaciones funcionen sin problemas. Una línea de crédito para negocios es una manera de tener efectivo disponible para aprovechar las oportunidades en un momento dado.

 

Mito n.º 4: Si nunca has pedido dinero prestado, tienes buen crédito.

Un buen puntaje de crédito no es algo con lo que naces. Se construye con el tiempo, al tomar dinero prestado.

Muchos negocios comienzan con una tarjeta de crédito para establecer un historial de crédito. A medida que aumentan el número de transacciones y los pagos mensuales, sus puntajes de crédito generalmente mejoran. Después de alcanzar un buen puntaje de crédito, solicitan una línea de crédito o préstamo a plazo. Un negocio que no hace ningún esfuerzo por establecer crédito puede tener dificultades para tomar prestado cuando necesita capital.

 

Habla con un especialista en desmentir mitos.

¿Tienes preguntas sobre lo que una línea de crédito podría significar para tu negocio? Habla con un representante bancario de Chase en tu área.